¿ A quiénes adoraban los egipcios por encima de todas las cosas ?...puessssssss, a majestuosidades como a nuestro querido Tizón. Por algo sería que una civilización tan puntera como la egipcia les venerase. Los gatos eran maestros zen en la Tierra, seres de quinta dimensión que nos ayudan a evolucionar como especie, de ahí esa veneración y pleitesía hacia ellos. 

¡Ayyyy, Tizón de nuestra vida y de nuestro corazón !. Algo ha cambiado en esta era, pero todavía quedan almas bellas que saben ver en vosotros esa divinidad sin igual que te atrapa y te transforma. 

Nuestro dios de ébano seguramente sea descendiente de la misma Bastet. Todo en él apunta a que nos encontramos ante un ser superior. Su belleza es supina, es una auténtica pantera en miniatura con los ojos del color del sol y con una suavidad adictiva. 

Vivió en la calle siendo cachorro ante todos los peligros que ello conlleva pero él es de los que "al mal tiempo buena cara" y gracias a eso nos fijamos en su nobleza y le sacamos de ahí. Ahora, él no puede estar más agradecido y se pasa el día venga a hacer la croqueta, venga a dar besitos, venga a amasar...¡ es que es divino ! Ya os lo estamos diciendo.

Se lleva bien con todo el mundo: perros, gatos, humanos...sólo quiere querer. El tío está sano y fuerte como un roble, y es muy blandito y achuchable. Si te quieres derretir todos los días con este dark bombón, es tu día de suerte porque busca una familia para siempre.